lunes, 4 de agosto de 2008

Pistas ·

Un frasquito de sueño lleno de insomnio.
Una bolsita gorda de frío.
Algunos bolsillos con peluzas de un tiempo que se lavó.
Varias ventanas que dan al sol cuando son las 10 de la mañana.
Las mangas que sobrepasan las manos por el doble.
Medias descalzas.

Un vaso de agua que se calentó en la boca.
Una telaraña dormida hace semanas.
Algunos reproches sin sentido.
Varias respuestas guardadas en un cajón.
Las puertas cerradas.
Media naranja.

Un señor enormemente minúsculo.
Una calle adorablemente desconocida.
Algunos semáforos.
Varias experiencias adueñadas.
Los besos reprimidos.
Miedo vital.

Un sucesor poco responsable.
Una abuela cuidando el jardín.
Algunas mascotas sin amor.
Varios deportistas frustrados.
Las películas que hay que ver.
Madonna.

Un periódico que regala promesas.
Una madre preocupada.
Algunos amigos con destino y sin rumbo.
Varios hermanos lejanos.
Gatitos mimosos.

Un deseo que se consumió con la vela.
Una torta imposible y tampoco el pan.
Algunos sombreros prestados.
Varios instrumentos desafinados.
Uñas largas.

Un rato repleto de mimos.
Una hora de caricias.
Algunos momentos de culpa.
Varias preguntas al viento.
Insatisfacción.

Un cariño sin motivo.
Una dulce noche de luna llena.
Algunos pantalones mojados.
Varias esperanzas puestas en la terraza.
Almendras.

Un sinsentido de lo más profundo en sí.
Una nebulosa por el todo que no se escribe.
Algunos confundidos que no saben ver.
Varios abrazos que quisieron ser.

Y mi mirada perdida en los actos de otros... mientras, estática, pienso paralelamente... y siento todo al mismo tiempo.

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