Ailo ·

Me mordés, me hacés cosquillas, me pegás, me empujás, me mordés, me mordés... Me cambiás la música, me ignorás, me burlás, me jodés; nunca me atendés el teléfono ni me contestás los mensajes, y cuando me llamás es para hacerme una joda; nunca aceptás mis proposiciones, ni mis besos ni caricias, pero bien que me apurás todo el tiempo; nunca me traés chocolate y después me llorás por tus cigarrillos. No me querés, lo sé, y tampoco te quiero.
Pero me mordés suavecito, para llamar mi atención y mostrarme que estás ahí; me hacés cosquillas y no paro de reír; después de empujarme me abrazás... Y sé que, a pesar de todo, te acordás de la canción que me gusta, usás el poco crédito que tenés (?) para preguntarme cómo estoy, me extrañás aunque nos hayamos visto el día anterior; sé que me tenés todas las ganas y por eso te provoco, porque algún día te rendirás al amor por Maru y te entregarás a lo nuestro; y tengo en cuenta que, en realidad, vivís complaciéndonos con dulces y viajes (L)
Entonces, por cada vez que me pasaste a buscar y compartiste tus canciones conmigo, por cada vez que viniste hasta mi casa para caer muerta en la cama todo el día, por cada vez que te afané ropa y terminaste regalándomela, por cada vez que nos acompañamos durante toda una clase en Ciudad, por las entradas a Muse y al Circo, por cada vez que confiaste en mí, por cada vez que te preocupaste por mí, por cada vez que demostraste ser vos y nadie más... te agradezco. Porque, en realidad, sí te quiero; y sé que vos a mí también.
Por eso te pido que nunca te olvides que sos una gran parte de mí... que tengo presente constantemente aunque vaya y venga e incluso duela, porque aprendo con vos y me recordás quién soy; te pido que no te resignes ante nada que no te satisfaga y luches por lo que querés, por vos, para seguir adelante... conmigo, que no te voy a dejar -quiero cuidarte y ayudarte, dejame-; te pido que seas consciente de esto y vuelvas a escuchar la canción que hoy a la mañana te dije que era muy propicia (:

Sos hermosa!